2025-10-14T16:43:20+02:0022 octubre 2025|
  • La necesidad de lograr ingresos para adquirir otra vivienda o la falta de beneficios fiscales asociados al alquiler son otras de las motivaciones de estos vendedores
  • Entre los demandantes de vivienda en propiedad, la mayoría rechazan alquilar porque consideran la compra de un inmueble como una inversión a más largo plazo y una forma de hacer patrimonio

Casi uno de cada cuatro ofertantes (23%) ponen su vivienda en el mercado y desestiman la opción de alquilarla para evitar los problemas derivados del cobro de las rentas. Se trata de un porcentaje ocho puntos superior al registrado en el primer semestre de 2024. Igualmente, también crece en tres puntos el argumento de vender en lugar de alquilar para evitar inquilinos que estropeen la vivienda, un motivo que pasa del 16% al 19%. Con todo, la venta por motivos personales sigue siendo la razón más citada: un 31% de los ofertantes expresó esta razón, aunque esta proporción se ha moderado respecto al 34% registrado en 2024, según las cifras del informe “Experiencia en compraventa en 2025”, elaborado por Fotocasa Research.

“Las preocupaciones de los propietarios ante posibles impagos, destrozos o incluso ocupaciones en sus viviendas están condicionando el comportamiento de la oferta en el mercado del alquiler. La percepción de inseguridad jurídica y la falta de garantías en la recuperación del inmueble provocan que muchos propietarios opten por vender antes que arrendar. El resultado es un círculo vicioso: el miedo a los riesgos desincentiva la puesta en alquiler de los inmuebles, y la reducción de la oferta disponible presiona aún más los precios al alza. Por ello, debido a la baja profesionalización del sector, se hace necesario marco legislativo estable y protector para ambas partes que pueda ampliar el flujo de viviendas hacia el alquiler”, explica María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.

Entre los propietarios de viviendas que quieren vender en lugar de alquilar, el propósito de comprar otra casa se sitúa también en una posición destacada: un 25% de los ofertantes reconoció haber puesto la vivienda a la venta con la intención de adquirir otro inmueble, la misma cifra que el año anterior. A continuación, un 13% de quienes optan por la venta de una vivienda en lugar de alquilarla consideran que no hay suficientes beneficios fiscales que superen los riesgos de contar con inquilinos, mientras que otro 13% señalan que es un buen momento para vender, ya que los precios están subiendo.

Asimismo, si se analizan los motivos personales de los ofertantes en general, destacan los herederos de una vivienda que deciden ponerla en el mercado de compraventa, una razón que indican el 30% de ellos (tres puntos más que en 2024). A continuación, otra motivación personal destacada es la venta para poder mejorar la vivienda actual, algo que defiende el 27% (dos puntos más que en el año anterior). En tercer lugar, el 14% de los vendedores esgrime una necesidad económica urgente para poner un piso de propiedad en el mercado.

Cuatro de cada diez demandantes de vivienda buscan una inversión a largo plazo

El informe aborda también la vertiente de la demanda, y subraya que la inversión a largo plazo sigue siendo una motivación relevante entre los compradores que descartan alquilar. Concretamente, casi cuatro de cada diez demandantes (37%) declara que su objetivo principal al adquirir una vivienda es realizar una inversión a largo plazo (una proporción idéntica a la del ejercicio anterior), mientras que un 36% (frente al 32% en 2024) opinan que la vivienda es un seguro para el futuro. Por otro lado, un 28% de los que prefieren comprar a pagar una renta sostienen que alquilar es una forma de tirar el dinero, y el 23% indican que la propiedad de una vivienda es una forma de hacer patrimonio.

Si se examinan los motivos estrictamente personales que impulsan la decisión de adquirir una vivienda en general, casi la mitad de los demandantes (46%) señala que la compra responde al deseo de mejorar su residencia actual. Otros motivos personales relevantes que muestran los potenciales compradores son la voluntad de convivir en pareja (19%), el crecimiento de la familia (18%), el deseo de emancipación (15%), el cambio de residencia por trabajo o estudios (9%), o la separación o el divorcio (6%).