2020-04-01T09:50:27+02:0029 enero 2018|

En 2017 el mercado de la vivienda ha confirmado que las positivas señales que veíamos en años previos iban en buena dirección y el sector se encaminaba hacia su recuperación. En este ejercicio hemos asistido a una consolidación de la financiación hipotecaria que, junto con la recuperación económica y del empleo, han devuelto la confianza en este mercado, muy denostado por la crisis.

Por tercer año consecutivo, se registran incrementos internaulaes en el número de compraventas e hipotecas por encima de 10%, a lo que habrá que sumar subidas de más del 20% en la solicitud de visados en este 2017 como consecuencia de ese mayor interés por la compra de vivienda, que había quedado paralizada durante la crisis. Esto ha tenido un traslado directo a los precios, el principal termómetro del mercado.

El Índice Inmobiliario fotocasa cierra 2017 con una subida interanual del precio medio de la vivienda del 5,1%, el mayor registro de todo nuestro histórico desde 2006 (7,7%) y la segunda subida interanual consecutiva (en 2016, se registró una subida del 1,9%). Y son 13 de las 17 comunidades autónomas las que cierran con incrementos interanuales de precios, frente a las seis que lo hacían el año pasado. Son datos que, junto con los que arrojan otras estadísticas del sector, confirman la recuperación del sector inmobiliario.

Pero una vez más, el mercado se mueve a diferentes ritmos. La mayor actividad del mercado, y con ella los mayores incrementos de precios, se concentran Cataluña, Comunidad de Madrid y las islas Baleares y Canarias, donde los precios se mueven a un ritmo del 7 al 15% en comparación con el año pasado. Estos incrementos contrastan con las caídas que se concentran en buena parte de las regiones del Norte del país, donde los precios ofrecen señales de estancamiento.

Desde que arrancó el año, el Índice Inmobiliario fotocasa reflejaba que los precios estaban creciendo con fuerza, sobre todo en las ‘grandes plazas’ y principales zonas turísticas de la costa Mediterránea. Madrid y Barcelona cierran el año con incrementos superiores al 10% que en algunos distritos de ambas ciudades superan el 20%, como es el caso de Sants-Montjuïc en la Ciudad Condal o del barrio Salamanca en la capital.

La demanda del particular se ha despertado este año, animada por la recuperación económica. Pero el inversor, tanto nacional como extranjero, sigue siendo el gran protagonista del de la compraventa, atraído por las altas rentabilidades que ofrece el alquiler en un contexto de tipos de interés en mínimos históricos.

Aunque son varios los riesgos que aún acechan al sector inmobiliario, las perspectivas son muy buenas para los próximos años si se mantiene el ciclo expansivo de la economía.

Beatriz Toribio
Directora de Estudios y Asuntos Públicos de fotocasa