El sector inmobiliario está demostrando resiliencia frente a los últimos cambios sociales, económicos y legislativos, que suponen la mayor alteración para el sector en la década. El restablecimiento del mercado tras el parón de la pandemia, la adaptación a la política monetaria de la eurozona y la entereza mostrada frente a la entrada en vigor de la primera ley de vivienda o la tentativa de la ley del suelo han sacado a relucir la capacidad de recuperación del mercado, que inicia un nuevo ciclo con previsiones económicas positivas, respaldadas por un aumento significativo en las inversiones y un repunte en las ventas.
El mercado de la vivienda encara el segundo semestre de 2024 con gran dinamismo, impulsado por la creciente demanda y una hoja de ruta monetaria más flexible por parte del Banco Central Europeo, lo que se traduce en condiciones hipotecarias más atractivas y un renovado interés en la compraventa. Tras un retroceso en el primer semestre, la actividad inmobiliaria ha recuperado terreno, alcanzando niveles de participación previos a la prepandemia.
Esta restauración de la actividad se manifiesta tanto en el segmento de compraventa como en el alquiler, con subidas en ambos mercados, aunque eso sí, la propiedad residencial reafirma su protagonismo por cuarto año consecutivo. Por su parte, la demanda de alquiler continúa ganando terreno y comienza a acortar distancias, evidenciando un potencial cambio de tendencia a futuro. Factores como el aumento de hogares debido a nuevas necesidades o la gran capacidad de atracción poblacional por la expansión empresarial en nuestro país, sumados a una fuerte demanda tanto nacional como extranjera, al inicio de nuevas etapas académicas de los jóvenes, o al aumento de los flujos migratorios, han contribuido a la reactivación de esta demanda con una especial intensidad en el arrendamiento, como primera solución habitacional.
El mercado llega a un punto de inflexión, en el que el desequilibrio entre oferta y demanda es cada vez más pronunciado. La oferta de viviendas disponibles a título privado se va reduciendo, mientras el parque público social sigue siendo totalmente insuficiente, son elementos que contribuyen a profundizar la escasez de viviendas y a mantener la presión sobre los precios tanto en venta como en alquiler. Por ello, nos enfrentamos a encarecimientos de precio a ritmos muy intensos.
En este informe, titulado Radiografía de la vivienda en España, se analizan en detalle estos patrones de demanda y oferta que marcarán el nuevo modelo del 2024 y el futuro del mercado inmobiliario.